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Cada año, miles de personas se congregan en el Centro Histórico de San Luis Potosí, para observar la Procesión del Silencio, evento único en México, pero no todos saben que existen lugares alternos donde se puede disfrutar de la procesión sin empujones, sin prisas y con una buena bebida o un platillo frente a ellos.
Varios establecimientos del primer cuadro de la ciudad estarán abiertos durante todo el Viernes Santo, manteniendo sus puertas disponibles a locales y turistas que deseen vivir la procesión desde un espacio más íntimo.
Lo único que se solicita es consumir alimentos o bebidas durante el tiempo de estancia.
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Uno de los puntos con mejor vista es la pizzería Nicol's, ubicada justo frente a la Plaza del Carmen, desde su segundo piso se tiene un ángulo privilegiado para observar el paso de las cofradías, con el Teatro de la Paz como fondo.
Además, en la misma zona, el café Italian Coffee en la esquina opuesta del teatro también ofrece una perspectiva perfecta, ideal para quien desea acompañar la procesión con una taza de café o un postre.
Otro punto estratégico es el hotel Panorama, ubicado frente a Los Arcos Ipiña.
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Desde su restaurante o sus balcones se puede observar cómodamente el desfile religioso.
Mientras tanto, frente a la Plaza de Fundadores, el restaurante La Parroquia también abrirá sus mesas exteriores para que los comensales puedan disfrutar del paso solemne de los estandartes, tambores y hábitos religiosos.
A un costado de Plaza de Armas, en la Posada del Virrey se permitirá el acceso a quienes deseen presenciar el evento desde sus instalaciones, como en los demás lugares, no hay un costo fijo para ver la procesión, pero se requiere realizar algún consumo, ya sea comida o bebida durante la permanencia.
Aunque no se cuentan con horarios exactos para el ingreso, estos establecimientos estarán abiertos desde la mañana, con horario regular, y cerrarán una vez finalizada la Procesión del Silencio.
Se recomienda llegar con anticipación, ya que conforme se acerca la hora de inició, la demanda de espacios aumenta considerablemente.
Esta es una forma distinta de acercarse a esta tradición que conmueve a potosinos y visitantes desde hace más de 70 años.
