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Un platillo emblemático e imperdible para todo aquel que visite San Luis Potosí son los tacos rojos que se preparan en el Jardín de Tequisquiapan, en el barrio que lleva el mismo nombre en la capital Potosina. Se trata de un platillo que, más allá de su excelente sazón, lleva consigo la carga cultural de generaciones.
Rosa María Almendarez Paredes, una de las hijas de doña Juana Paredes Torres, fundadora de los famosos tacos, relató con orgullo que, si bien su madre ya no trabaja en el puesto, ha dejado el legado a sus hijos, nietos y bisnietos, quienes ahora se apoyan unos a otros para sacar adelante el trabajo.
“Es una herencia que mi mamá nos dejó… el trabajar y salir adelante es cosa que nos enseñó y de toda la vida para poder sobrevivir uno mismo”, indicó.
En el puesto, el cual consiste de un brasero y algunas mesas donde se disponen los implementos e ingredientes para preparar y acompañar a los deliciosos tacos, se encuentra en la esquina del jardín, donde cruzan las calles Mariano Arista y Mariano Ávila. Frente al puesto, decenas de clientes esperan pacientemente para cenar los taquitos de la familia Paredes.
“El fin de semana es cuando hay más gente, como unas 200 personas más o menos en total y ya, entre semana, son de 100 a 130”.
Entre los familiares se dividen las labores para poder atender a toda la clientela de la manera más rápida posible: una persona se encarga de “soplar” el carbón, otra de la preparación de las enchiladas, la cual consiste en freír la tortilla y la verdura, además de rellenar los taquitos de queso.
Asimismo, otra persona se encarga de acomodar los tacos en platos de unicel para, posteriormente, entregárselos al cliente y que éste pueda ponerle al gusto salsa, verdura o cueritos. Por último, otro familiar se encarga de cobrar a los clientes.
Más allá de tacos rojos, el negocio se ha expandido a quesadillas y molotes.
Las quesadillas pueden estar rellenas de queso, rajas, frijol, chorizo y papas. Por su parte, los molotes, los cuales son bolitas de masa como en forma de tamal de masa, llevan el mismo relleno que las quesadillas.
Además, Rosa María comentó que el taquito rojo va enrollado y lleva de relleno queso y cebolla, pero, si el cliente gusta, puede ir con puro queso.
El origen de los tacos rojos de Tequis
Rosa María relató que el negocio, que aprendió de primera mano de su madre, surgió porque ella vendía tortillas y enchiladas de casa en casa. Un día, una persona le dio la idea de poner su puesto de enchiladas. Debido a esto, doña Juana Paredes decidió comenzar su negocio en Mariano Ávila y, poco a poco, fue introduciendo a la venta los tacos rojos, los cuales se convirtieron en un éxito que ha durado por generaciones llegando a 63 años años desde su inicio.
