Esta playa no está en el Caribe, pero tiene una gran similitud con Cancún por sus aguas turquesas y alrededores paradisíacos. La playa Barra de Tampapiche, deslumbra por su belleza natural, su tranquilidad y por su entorno tan poco explorado que parece un destino secreto.
Esta playa que se ubica en Las Chacas, Veracruz y que queda a tan solo tres horas del municipio Ciudad Valles de San Luis Potosí, oculta varias islas pequeñas con distintos tipos de aves como las gaviotas que se posan allí para descansar y alimentarse.
Lo que hace mágico este lugar es que sus playas son vírgenes, por lo que son áreas con mucha diversidad de fauna, por esta razón se pide respeto para los animales y los espacios.
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Al ser un lugar que carece de infraestructura de una playa turista, hay que ser muy cuidadosos con el medio ambiente y con los alrededores, pues hay pequeñas comunidades que viven en este lugar.
A diferencia de Cancún, Barra de Tampapiche conserva una esencia silvestre, no hay hoteles, restaurantes ni construcciones invasivas, convirtiéndose en la playa ideal para desconectarse, caminar en la arena y contemplar la belleza del horizonte que contrasta maravillosamente con el agua.
Si visitas este increíble destino se te recomienda que no lleves mascotas, no dejar basura y no hacer ruidos fuertes porque pueden alterar el frágil equilibrio del ecosistema.
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También se aconseja que lleves tu propia agua, comida y bolsas para llevarse los residuos. El acceso a la playa es por brechas de terracería, lo cual ayuda a que se mantenga lejos de zonas turísticas.
Quienes han ido a Barra de Tampapiche coinciden en que parece un pedazo del Caribe pero sin aglomeraciones. Si decides conocerlo disfrútalo al máximo pero no olvides hacerlo con conciencia: disfruta de tomar fotografías, nadar en su aguas cristalinas y contemplar el paisaje.