El gobierno de Fernando Toranzo Fernández heredó un boquete de 300 millones de pesos que se necesitan para terminar y equipar obras inconclusas en materia de infraestructura de salud, incluyendo al menos 70 millones de pesos para poder concluir las obras de ampliación del Hospital General de Rioverde en la zona Media.

Durante su comparecencia ante diputados locales, la secretaria de Salud Mónica Liliana Rangel Martínez, afirmó que la dependencia a su cargo no puede ejecutar la conclusión de estas acciones, debido a que se mantiene un proceso jurídico en contra de tres empresas que incumplieron con estos trabajos desde la administración anterior.

"La demanda para la recisión del contrato está firme y hay un amparo; nosotros reforzaremos y estamos confiados en que el tribunal falle a favor, pero no podemos llevar acciones de ampliación por esta circunstancia, sin embargo, una vez que esto se resuelva, iniciar los procedimientos contra algunos servidores públicos, pero deben agotarse los derechos de las empresas y el tiempo procesal", dijo a los diputados.

Por su parte, el diputado Sergio Desfassiux defendió a la funcionaria al señalar que le tocó “la papa más caliente del gobierno del estado”, al tener que resolver problemas heredados.

Rangel Martínez señaló que desafortunadamente la obra del hospital en Rioverde no es la única que tiene ese tipo de rezagos, ya que existen otros espacios como el hospital de la zona Altiplano y otras en todo el estado que no pueden terminarse por falta de recursos, por lo que reconoció que han tenido que buscar otras alternativas para dar la atención a la población como es subrogar servicios y evitar traslados a la capital potosina.

"No estamos funcionando en condiciones óptimas en el hospital de Rioverde, no podemos ocupar las áreas que estaban bajo la empresa, no hay espacios físicos, el espacio de laboratorio, rayos x por la cuestión del litigio por ejemplo, pero buscamos algún recurso adicional para dar servicios o subrogarlos para poder dar atención y evitar traslados, porque eso implica recursos que no tenemos", apuntó.

Los diputados ofrecieron generar un trabajo conjunto para identificar recurso no presupuestado en el gasto estatal y pidieron que a través de una solicitud adelantada poder empezar a trabajar en la gestión junto a la Secretaría de Finanzas para disponer de esos 70 millones de pesos para terminar el proyecto del nosocomio y dar curso además a los procedimientos en contra de servidores públicos que hayan cometido irregularidades en este proceso, debido a que ya que se ha convertido en un problema social la carencia de servicio en este hospital.

En el año 2015 comenzó un proyecto para ampliar ese centro de salud, con un presupuesto de 45 millones de pesos, destinado a construir áreas para 15 consultorios de especialidades, archivo clínico, laboratorio, hemodiálisis, cocina, residencia médica, almacén, patología y áreas administrativas. Sin embargo, el proyecto actualmente se encuentra detenido y todavía en obra negra.

sergio.marin@clabsa.com.mx

apl

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