A pesar de que el Presidente Andrés Manuel López Obrador prometió que la Sierra de San Miguelito, en San Luis Potosí, se protegería contra empresas inmobiliarias, quienes pretenden construir desarrollos urbanos y complejos industriales en la zona, no existe voluntad por parte de las autoridades locales de proteger esta área, la cual alberga docenas de especies de fauna y flora, entre ellas el águila real, símbolo de la bandera nacional, afirmó Carlos Covarrubias Rendón, asesor jurídico e integrante de la organización Frente Amplio Opositor (FAO).

En entrevista con EL UNIVERSAL el activista informó que el gobernador de la entidad, Juan Manuel Carreras entregó al titular del Ejecutivo federal una propuesta de declaratoria de Área Natural Protegida en un polígono de 63 mil hectáreas de la sierra, “pero éste excluye a cerca de 10 mil, que son las hectáreas que buscan y ansían los grupos empresariales”.

“Los comuneros no están de acuerdo, y son quienes han interpuesto toda una serie de defensas jurídicas para evitar que la Procuraduría Agraria avale el proceso de aportación de tierras comunales, de acuerdo a lo que plantea grupos residenciales, quienes tienen el apoyo de alguna parte de la comunidad que ellos tienen subordinados”.

El activista señaló que el acoso inmobiliario ha sido constante y que parte de sus argumentos es que la codiciada sierra está deteriorada, sin protección, por lo que “los desarrolladores han estado estableciendo una estrategia de mediano y largo alcance para hacerse de estas tierras”.

El pasado 25 de mayo, en visita a la entidad, el Presidente Andrés Manuel López Obrador en consulta a mano alzada, pidió a los asistentes al mitin que levantaran la mano aquellos que quisieran impulsar proyectos de desarrollo urbano en la zona de la Sierra de San Miguelito.

Una docena de brazos fueron alzados, por lo que López Obrador señaló que eran “muy poquitos”. Tras esto, pidió que levantaran la mano aquellos que quisieran conservar la sierra como una zona de reserva natural. Fue mayoría.

“Bueno, voy a pedirle a la secretaría de Medio Ambiente, a Josefa González [extitular de la Semarnat], a que venga con el gobernador y que lleve a cabo un estudio y que podamos resolver lo más pronto posible. Nunca más se va a permitir que se destruya el territorio, que se destruya la naturaleza, el medio ambiente”, aseguró.

Carlos Covarrubias Rendón detalló que en esta sierra viven 15 especies animales bajo alguna categoría de riesgo, de acuerdo con la NOM-059-SEMARNAT-2010, y cinco especies endémicas, como la águila real, el lagarto cornudo, aguililla aura, tejones y ardillas Peter, así como víboras de cascabel negra; además de que hay 15 especies vegetales en categoría de riesgo, la mitad de ellas cactáceas, así como ejemplares de pino piñonero y unas 10 especies de encinos.

“De perderse este lugar, se perderán también un pulmón muy importante para el centro de San Luis Potosí. Se debe de proteger toda la sierra, como lo dijo el Presidente, porque también este lugar es una zona importante de recarga de mantos acuíferos”, dijo.

REPRESIÓN Señaló que la represión ha sido una constante en la lucha por la defensa de esta sierra, y él la ha sufrido puesto que hace unos meses fue emboscado por presuntos habitantes afines a las empresas inmobiliarias, y cuyas efectos tendrá de por vida.

“Se vive en la región un clima hostil, por ejemplo, a nosotros nos emboscaron en el mes de febrero durante un recorrido temático para mostrar las condiciones de la Sierra de San Miguelito, y un grupo de gente afines a los empresas nos emboscó, nos golpearon; me rompieron cinco costillas, me golpearon la cara, y me quebraron la clavícula por lo que me tuvieron que colocar una placa que tendré de por vida debido a estos golpes”.

A pesar de la represión, asegura que los activistas que defienden la sierra no se dejarán amedrentar y continuarán defendiendo que se proteja, puesto que “es nuestro medio ambiente, y ahí depende nuestra vida, sin aire y sin agua no podríamos sobrevivir. La lucha es por nuestra vida, pero también para que las próximas generaciones puedan disfrutar de todo lo que la naturaleza nos ofrece. No todo el mundo se mueve por el dinero, muchos nos movemos para garantizar el respeto a la vida y eso, en nuestro caso comienza con la defensa de esta sierra”.

Con información de Pedro Villa y Caña

vkc

Google News

TEMAS RELACIONADOS