Paulina se enteró por teléfono del fallecimiento de su hermano Leopoldino, de 24 años de edad.

El joven, quien cursaba el octavo semestre de la licenciatura en Comercio y Negocios Internacionales en la UASLP, murió en el accidente del pasado 28 de octubre, ocasionado por una revolvedora que se quedó sin frenos.

“Polino”, como varios lo llamaban, estaba comiendo en un puesto de tacos ubicado en bulevar Rocha Cordero y avenida Chapultepec cuando dicha unidad embistió a varios vehículos a su paso, hecho que, indicó el ayuntamiento de la capital de esta entidad, dejó a ocho personas lesionadas.

Luego de que los compañeros de Leopoldino Ortiz contactaron a los familiares para decirles que él no había regresado de su tiempo libre, Paulina le marcó al celular a su hermano y le contestó una médica forense. “Tuvimos que ir mi hermana y yo a reconocerlo”, dijo a El Gran Diario de México.

Tras el accidente, las dos hermanas de Ortiz Huerta tuvieron que realizar los trámites correspondientes para que les entregaran el cadáver de su familiar.

“Él fue impactado por la tolva”, detalló Paulina, quien afirmó que ellos son descendientes del exgobernador potosino Leopoldino Ortiz Santos.

Dos días después del accidente, el sábado 30 de octubre, “Polino” fue sepultado en el cementerio Valle de los Cedros, en la capital de esta entidad.

“Pues su hijo está muerto, ¿no ve noticias?, venga por él”

La hermana del joven señaló que tanto ella como su madre le marcaron a Leopoldino al celular y que a través de ese medio ambas se enteraron del deceso; sin embargo, en el caso de la mamá de “Polino” la noticia se comunicó “de forma abrupta”.

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“La persona que le contestó le dijo: 'pues su hijo está muerto, ¿no ve noticias?, venga por él'. Cuando mi hermana y yo llamamos de hecho creemos que fue otra persona [la que nos atendió], porque fue totalmente diferente, a nosotras sí nos lo dijeron con más tacto y, de hecho, cuando fuimos al Semefo el trato fue humanamente de calidad, pero a mi mamá sí le dieron la noticia muy, muy feo”, dijo Paulina.

Leopoldino era ejecutivo en un banco ubicado en avenida Chapultepec y su hermana lo recuerda como una persona noble, ocurrente y cariñosa que transmitía una energía tranquila, alguien que buscaba una solidez económica. “Era muy protector también”, finalizó.

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etp

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