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Con tan sólo nueve años de edad, David Aguilar crea la primera prótesis para su brazo articulada sólo por piezas de Lego para construir un avión dándole la capacidad de movimiento para sujetar cosas.
El chico, ahora de 19 años, de nacionalidad andorrana, nació con una malformación en el brazo derecho, impidiendo que se terminara de desarrollar por completo el antebrazo y la mano, pero eso no lo detiene pues tiene una gran pasión por la tecnología que ahora convertirá en una vocación creando cosas para ayudar a la gente.
Su padre, Ferrán Aguilar, fue quien empezó a compartir videos y fotografías de David en Facebook dejando ver su gran hazaña, gracias a esto la noticia llegó hasta Lego. La compañía les dedicó unas conmovedoras palabras resaltando la tenacidad y fuerza con la que su hijo enfrenta la situación.
“Nos has dejado sin palabras… La fuerza y el tesón de David son las cosas que nos hace sentirnos orgullosos y por las que queremos seguir dando la oportunidad a que todos los niños del mundo tengan acceso a nuestros ladrillos de Lego. Muchísimas gracias por compartir con nosotros.” Fueron las palabras de la empresa de juguetes.
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Además, David decidió compartir con el mundo entero su nuevo brazo robótico y explicó todo el proceso que había seguido hasta lograr construir la prótesis, por medio de su canal de YouTube.
“He hecho un brazo con las piezas de Lego con las que antes había hecho un helicóptero, lo desmonté y lo construí aprovechando la forma de mi mano, encaja por completo con la parte interior del brazo. A medida que encierro el brazo con un engranaje interior el brazo queda totalmente fijado, lo que impide que resbale”, cuenta David. “Cuando muevo el brazo la mano se abre y se cierra, lo que me permite agarrar objetos ligeros y también flexiones, con lo que era un juguete he podido cumplir mi sueño”, añade.
El joven tiene en claro que quiere crear una empresa en la que se creen pótesis para cada una de las personas que lo necesiten y fusionarlo con la ingeniería en informática. Actualmente estudia bioingeniería en la Universidad Internacional de Cataluña con su ya cuarta prótesis de colores.
