Más Información
La familia de Martín Duque, el joven mexicano de 14 años, fallecido en la escuela Marjorie Stoneman Douglas High School de Florida, Estados Unidos abrió una cuenta de GoFundMe en internet para que sus abuelas puedan viajar desde México al sepelio del adolescente.
“Era un niño muy divertido, extrovertido pero a veces realmente callado. Era dulce, cariñoso y querido por todos en su familia. Por encima de todo era mi hermanito. Mi familia y yo no tenemos palabras para describir lo que sentimos y la tragedia que estamos viviendo”, señala Miguel uno de sus hermanos, quien abrió la cuenta que hasta el momento suma 43 mil 110 dólares recaudados.
Miguel aclara que pese a que el estado y la Fundación de Edudación de Broward pagarán los gastos del funeral de su hermano, las donaciones ayudarán a cubrir los gastos adicionales que la familia enfrentará como resultado de la tragedia, así como “traer a mis dos abuelas de México para el funeral”.
Ambas abuelas, señala, fueron las que los criaron a él y sus hermanos “mientras nuestros padres vivían en Florida antes de ahorrar dinero suficiente para llevarnos a nosotros también”.
Miguel añade que los fondos también servirán para “alojar a nuestra familia extendida durante el funeral”.
La familia ha pedido privacidad para el funeral que esperan realizar este fin de semana.
Autoridades del Consulado General de México de México en Miami han ofrecido asistencia y apoyo moral a la familia de Marrtín, cuyo padre es nacido en el Estado de México, y la madre, así como el menor fallecido, son originarios de Coyuca de Catalán, Guerrero.
La misión diplomática ha ofrecido además asistencia para los funerales, agilización para la gestión de pasaportes y solicitud de visas humanitarias para los familiares que las requieran para viajar a Florida y acompañar a los deudos.
Martín Duque es uno de los estudiantes que murieron el pasado 14 de febrero en la escuela conocida como “Douglas”, cuando Nikolas Cruz, un joven de 19 años con aparentes problemas mentales entró a la escuela con un rifle de asalto AR-15 y masacró a 15 estudiantes, un maestro de Geografía y un entrenador de futbol americano.
Esta es la peor masacre en un recinto escolar desde que 20 niños y seis adultos murieron en el 2012 en la matanza de la primaria de Sandy Hook de Newtown, Connecticut, perpetrada por el joven Adam Lanza, y que ha reavivado un debate nacional sobre el control de armas en Estados Unidos.