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Al menos 136 personas murieron al hundirse un ferry que viajaba repleto de pasajeros en el lago Victoria en Tanzania, informó ayer el ministro de Transportes, Isack Kamwelwe, en la radio estatal.
Además hay decenas de desaparecidos. Tras reanudarse las tareas de búsqueda se encontraron más cadáveres en el agua, señaló John Mongella, representante gubernamental en la región de Mwanza. Anteriormente, precisó que es probable que el número de decesos aumente.
Unas 100 personas fueron rescatadas con vida el jueves después de que naufragara el MV Nyerere entre Bugolora y la isla de Ukara. Buzos profesionales de Dar es Salam y de la vecina región de Mara llegaron al lago Victoria para apoyar en las labores de rescate.
Las estimaciones iniciales apuntan a que el ferry transportaba a más de 300 personas, pero el número exacto de pasajeros se desconoce, según la Agencia de Servicios Eléctricos, Mecánicos y Electrónicos de Tanzania (Temesa), a cargo del mantenimiento de los barcos del país. “Se teme que hayan muerto más de 200 personas”, según informes de pescadores y otras personas cercanas, dijo a The Associated Press la portavoz de la Cruz Roja de Tanzania, Godfrida Jola.
La embarcación se hundió a pocos metros del atracadero cerca de la isla de Ukara, en el distrito de Ukerewe, reportó Temesa. El navío quedó boca abajo, por lo que muchos pasajeros quedaron atrapados en su interior. El presidente John Magufuli ordenó la detención de los responsables del accidente, y decretó cuatro días de duelo nacional.
El primer ministro del país, Kassim Majaliwa, suspendió una visita que tenía programada para trasladarse a la zona.
Según un informe del periódico The Citizen, el capitán del transbordador fue puesto bajo custodia. Las primeras investigaciones indican que dejó al mando del timón a alguien sin experiencia, quien tripulaba la nave en el momento del incidente. Igualmente, el presidente mencionó como primera causa de los hechos la sobrecarga del ferry.
El buque tenía capacidad para 101 personas, pero estaba sobrecargado, dijo a reporteros el secretario de gobierno, John Kijazi. Aseguró que los responsables serán llevados a juicio.
El papa Francisco y varios líderes africanos expresaron conmoción y dolor por el incidente.
Hace apenas dos meses, el barco, construido en 2014, había sido renovado, informó el portavoz del gobierno tanzano, Hassan Abbas. Dos nuevos motores fueron incorporados a la embarcación, agregó. Anteriormente, un diputado había advertido de que el bote suponía un riesgo por su mal estado.
James Mbatia, presidente de uno de los partidos de la oposición parlamentaria del país, el NCCR Mageuzi, acusó al gobierno de no llevar a cabo las reparaciones que el MV Nyerere necesitaba, pese a conocer las averías que sufría.
Los transbordadores que cruzan el lago suelen llevar cientos de personas y a menudo están hacinados. Son frecuentes los accidentes en el lago de agua dulce rodeado por Tanzania, Kenia y Uganda.
