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El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, desató una tormenta navideña en las redes sociales cuando cuestionó si una niña de siete años era demasiado grande para creer en Santa Claus.
Pero no hay nada de qué preocuparse.
La niña, Collman Lloyd, de Lexington, Carolina del Sur, dijo a los periódicos Post y Courier que aún creía en Santa Claus. Ella y sus dos hermanos dejaron galletas glaseadas con azúcar y leche para Papá Noel durante la noche y, a la mañana, esto había desaparecido y había regalos debajo del árbol.
Twitter estalló después de que Trump, luego de una semana de caída de acciones, un cierre del gobierno y la partida del jefe de Defensa del país, cuestionó la ilusión de los niños.
"¿Sigues creyendo en Santa?", le preguntó Trump a Collman en una llamada telefónica. "Porque a los siete, es raro, ¿verdad?", agregó.
En un video que su familia publicó en internet, la niña respondió: "Sí, señor" y luego le dijo al periódico que no tenía idea de lo que significaba "raro".
Trump hizo el comentario durante un evento festivo con la primera dama Melania Trump, en el que atendía llamados de niños desde el rastreador de Santa del Mando Norteamericano de Defensa Aeroespacial.
El rastreador es una tradición navideña que deleita a los niños con actualizaciones "en tiempo real" del viaje de San Nicolás durante la Nochebuena.
La Casa Blanca no emitió comentarios inmediatos sobre las respuestas en las redes sociales a los comentarios del presidente sobre Santa Claus.
