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La bancada del PRD en la Cámara de Diputados le exigió al presidente Andrés Manuel López Obrador que continúe y concluya los proyectos ferroviarios de México-Toluca y Metropolitano de Guadalajara, y aclare las acusaciones de corrupción denunciadas en ambos proyectos y aplicar la ley como corresponde a los presuntos culpables de las irregularidades.
A través del diputado perredista José Guadalupe Aguilera Rojas también exigió al titular del Ejecutivo Federal apegarse a la legalidad en el anunciado Tren Maya, ya que al momento incumple varios requisitos de planeación, financiamiento e impacto ambiental para su concreción.
El también secretario de la Comisión de Infraestructura de la Cámara de Diputados dijo que tanto en el Tren México-Toluca como en el Metropolitano de Guadalajara se incumplió con lo originalmente proyectado a pesar de que en su momento se dijo que se habían acatado todos los requisitos y especificaciones, lo que provocó que no se concluyan todavía, a pesar de que ya se les invirtió una gran cantidad de recursos.
Sin embargo, el legislador consideró que no por ello se deben cancelar pues hay que priorizar su necesidad y utilidad para una gran cantidad de personas a quienes serviría para ahorrar tiempo y dinero en sus traslados entre la capital de la República y la capital del Estado de México, en el primer caso, y entre la capital de Jalisco y sus municipios conurbados, en el segundo.
Recordó que el mismo Presidente de la República se comprometió en campaña a darles continuidad precisamente por eso y a pesar de las irregularidades que detectó la Auditoría Superior de la Federación en ellos.
Señaló al titular del Ejecutivo de incurrir en incongruencias en el sentido de comprometerse, por una parte, a combatir el incumplimiento de la ley y, por el otro, de incurrir en esos mismos incumplimientos en el proyecto del Tren Maya porque, por ejemplo, se desconoce la manifestación de impacto ambiental y la afectación que tendrá en la flora y fauna de la Península de Yucatán.
Adicionalmente, no hay consenso entre los comuneros, ejidatarios y pequeños propietarios de los terrenos por donde se hará el tendido de vías.
“En estas circunstancias no se puede ni debe continuar con el Tren Maya. Por eso exigimos y pedimos en la Comisión de Infraestructura que se dé una explicación e información a los mexicanos para que sepamos qué pasa y de esa manera se genere veracidad y tranquilidad”, puntualizó.
Aguilera Rojas reconoció lo beneficioso que sería un proyecto de este nivel para el sur y sureste del país porque, ciertamente, significaría inversión e infraestructura para una zona en la que ambas han sido escasas, pero reiteró que debe ser en apego a la legalidad.
En tal sentido, los concursos para las empresas interesadas en participar deben convocarse con claridad, transparencia y legalidad, de modo que gane la mejor oferta en cuanto a precio, calidad y beneficio para los mexicanos, y no resulten otros proyectos con sobreprecio como los de México-Toluca y Metropolitano de Guadalajara.
El proyecto "Tren Interurbano México-Toluca " se previó con longitud de 57.7 km, de los cuales 40.7 km corresponden al Estado de México y 17 km a la Ciudad de México, integrados por dos viaductos elevados con una longitud de 36.2 km y un bitúnel de 4.5 km de longitud y diámetro de 8.5 m cada uno.
La Auditoría Superior de la Federación (ASF) señaló en su informe de febrero de 2019 que revisó 16 de sus contratos y detectó incumplimiento de criterios establecidos en los trabajos, así como de rendimientos y costo para material y mano de obra.