Polisemia quiere decir “pluralidad de significados de una expresión lingüística”. Una expresión, nos dice el Diccionario de la lengua española, puede ser una palabra. Una palabra es, si se quiere, una unidad lingüística. Entonces, “calvario”, que se entiende como “sucesión de adversidades y pesadumbres”, es una expresión lingüística apropiada para describir lo que se padece en numerosos lugares del país, a causa de las guerras entre grupos criminales y los combates del Estado mexicano contra los cárteles.

Así que calvario, en México, bajo nuestra narcodemocracia, tiene pluralidad de significados.

Calvario quiere decir levantón, acto que utilizan los criminales para secuestrar, torturar y en ocasiones desaparecer a otros criminales, pero también a efectivos de los cuerpos de seguridad que los combaten, o a personas inocentes. Esta costumbre es igualmente repertorio conductual de policías y militares corruptos y violadores de derechos humanos.

Calvario es masacre, el asesinato de tres o más personas, normalmente ejecutadas con tiros de gracia.

Fosa clandestina, que es el sitio donde delincuentes entierran cuerpos o restos humanos de personas que levantaron.

Mutilación, que quiere decir descuartizamiento de cadáveres y en la narcocultura que nos corroe se trata del desmembramiento (los narcos tiran cabezas) o disolución de un cadáver, pozolearlo en algún químico abrasivo.

Calcinamiento es el uso del fuego sobre un cuerpo, previamente levantado, para producir, hasta la muerte, quemaduras de diversos grados o carbonización.

Tortura, en tierras mexicanas, es un asesinato lento (muchas veces grabado en vídeo) durante el cual se inflige a una persona dolor y sufrimiento extremos.

Calvario es sicariato, ese oficio criminal que multiplica la generación de niños, adolescentes y jóvenes dispuestos a matar a quien sea por un puñado de pesos o dólares.

Feminicidio. En un país profundamente macho y misógino, es el asesinato de mujeres con crueldad extrema, ya que les han infringido lesiones o mutilaciones infamantes o degradantes, previas o posteriores a la privación de la vida. A veces este crimen se acompaña con actos de necrofilia, que se han vuelto sello de ritos narcos.

Calvario es esclavitud y trata, la explotación o comercialización de una persona, muchas veces con fines sexuales, siempre a través del uso de fuerza y maltratos extremos, como sucede contra mujeres y migrantes que también son reclutados por capos del sicariato.

En México, las diez palabras que enlisté en negritas son polisémicas de “calvario”.

Agréguele las expresiones de terror que usted guste, las que usted conozca en su colonia, en su municipio, en su estado. Finalmente las particularidades del calvario nacional son reflejo de nuestras muchas violencias cotidianas y tienen variantes según la región en la que se perpetran.

Por eso, porque a la violencia hay que nombrarla, describirla y narrarla para combatirla, desde 2020 la organización de la sociedad civil Causa en común se ha dado a la tarea de recopilar esta galería del horror, estas “atrocidades” que son perpetradas a lo largo de la república, de acuerdo a lo que publican cada día los medios de información (https://bit.ly/3nYs23u).

En 2022 ese calvario general y su polisemia generaron… ¡6,217 atrocidades perpetradas por mexicanos! Eso implica, en promedio, 17 escenas de terror por día, una cada hora y media. Todas esas monstruosidades causaron la friolera de 10 mil 799 víctimas, 29 por día, en promedio.

¿Cuáles fueron las principales atrocidades?

Tortura, con 1,793 casos. ¿Alguien tiene duda que civiles y fuerzas del orden torturan en este país?

Mutilación, descuartizamiento y destrucción de cadáveres, con 808 casos. México está lleno de destripadores y no es literatura sino preocupante normalización de la violencia.

Asesinato de mujeres con crueldad extrema, 801 casos. Por Dios, qué país les estamos heredando a nuestras hijas y nietas, lleno de machos seriales.

Masacre, 500 casos. ¡500 masacres en un año! La barbarie de los grupos criminales cada vez es más insolente y desinhibida . Al menos perpetran una masacre al día, los muy hijos del sicariato.

Actos violentos contra la autoridad, 380. Esas agresiones contra policías, soldados, marinos y guardias cada vez van siendo más comunes, hasta llegar ya a un caso por día, en promedio. Quién quiere ser policía o militar en México, para quedar a merced de los criminales sin que te permitan responder sus ataques, o para que cuando te defiendas algunas comisiones de derechos humanos de dudosos vínculos te linchen mediáticamente y acabes preso y deshonrado.

Asesinatos de niños y adolescentes, 359. Esa es una de nuestras tragedias más apremiantes, los menores de edad cada vez más vinculados a hechos de violencia y criminalidad con todo y sus consecuencias fatales.

Fosas clandestinas, 290. ¡Sí, 290 fosas clandestinas halladas en un año! Eso representa un promedio de al menos cinco fosas encontradas por semana, gracias a los esfuerzos de las madres y familiares buscadores de desaparecidos.

ESTADOS ATROCES

Los estados con más atrocidades en 2022 fueron:

-Baja California, con 605 casos, entre los que hubo 220 expedientes de tortura, 89 asesinatos de mujeres con crueldad extrema y 31 fosas clandestinas. Este estado es peleado por dos cárteles ya que es un importante paso de drogas, armas y de tráfico de personas.

Guanajuato, con 547 atrocidades. Los principales casos fueron 156 de tortura, 112 de descuartizamiento y destrucción de cadáveres y 65 masacres. Esta entidad es zona de disputa entre dos cárteles nacionales y uno local que se disputan huachicoleo, fabricación y trasiego de estupefacientes.

Michoacán, con 438 atrocidades, entre las cuales se registraron 53 masacres, producto de la guerra entre dos cárteles para quedarse con el tráfico y producción de drogas, así como con grandes zonas de extorsión agrícola. También hubo 51 asesinatos con violencia extrema de mujeres, ya que ambos grupos en disputa tienen cinco años tomando mujeres del enemigo como trofeos de guerra. Igualmente se registraron 42 asesinatos de niños, niñas y adolescentes, consecuencia del reclutamiento de menores de edad en las filas narcas.

Morelos, con 407 atrocidades, que es área de otra guerra entre varios grupos criminales por la producción, trasiego y venta local de drogas, lo que causó 137 casos de tortura, 112 mutilaciones y desmembramientos, y 65 masacres. Anden, vuelvan a elegir un futbolista como gobernador.

Y Estado de México, con 306 atrocidades, entre las que hubo 30 masacres, 47 asesinatos de mujeres con violencia extrema y 19 calcinamientos. Igual que Morelos y Michoacán, las guerras narcas que se pelean el territorio causaron esos calvarios provocados por pirómanos de tierras narcas.

Las entidades con el menor número de noticias sobre atrocidades fueron Coahuila, con 26. Querétaro, con 35. Aguascalientes, con 39. Baja California Sur, con 44, y Campeche, con 46.

AL FONDO

Ese salvajismo de las atrocidades nos debe preocupar mucho, porque va creciendo: en 2021 Causa en común documentó sólo 5,333 atrocidades, así que hubo un crecimiento de más de 16% entre ese año y 2022. Las víctimas de 2021 fueron 8,759, por lo que el aumento entre ese año y el pasado fue de más de 23%.

En 2023, en los primeros dos meses del año, Causa en común, presidida por María Elena Morera, documentó que se cometieron en el país al menos 1,106 crímenes de extrema violencia que pueden ser clasificados como atrocidades, lo que representa 24% más que en el mismo periodo de 2022.

Pero todo va bien en nuestra santa sociedad católica y cristiana, ¿verdad?

Usted ya sabe, basta que durante estos días de viacrucis los sicarios le recen a su santa muerte, repartan jugosas limosnas en la parroquia de su elección, y se confiesen con el cura de la esquina para que queden absueltos y vuelvan a perpetrar atrocidades.

¿O no?

BAJO FONDO

Narrar la violencia más atroz no nos vuelve atroces, nos libera para contener atrocidades.

jp.becerra.acosta.m@gmail.com

Twitter: @jpbecerraacosta

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