Hace unos días dialogaba sobre el Decálogo por la Inclusión que impulsa el PRI, el cual tiene como objetivo prevenir cualquier forma de discriminación por motivos de discapacidad, promover una cultura de inclusión, establecer una agenda vinculante con organizaciones de la sociedad civil e impulsar plataformas políticas tendiente a hacer visibles los derechos de tan importante sector de la población; por tanto, concluíamos en que debemos involucrarnos e impulsar una serie de acciones que nos permitan la generación de políticas pública y en consecuencia la capacitación de cuadros partidistas y sociales que fomenten la participación de personas con discapacidad en la vida pública.

Acorde al informe del INEGI “La discapacidad en México”, en el país hay 7.7 millones de mexicanos que tienen algún tipo de discapacidad, lo que representan el 6.6 por ciento de la población que merecen la atención del Estado, y que tenemos que reconocer que un importante porcentaje de ellos permanecen aislados de la educación y sin acceso real al mercado laboral.

Como bien nos los dice la exsecretaria de Salud en México la doctora Mercedes Juan López, la población de las personas con discapacidad en México se debe de convertir en una importante línea de atención para la generación de políticas públicas que logren promover, proteger y asegurar el pleno ejercicio de los derechos humanos y libertades fundamentales, asegurando su plena inclusión a la sociedad en un marco de respeto, igualdad y equiparación de oportunidades.

También explica, que se ha abordado la atención de las personas con discapacidad como un aspecto del área salud, generando una orientación más como de enfermos, así también, desde los ámbitos de desarrollo social, pasando ahora a pobres o limitados; lo que se requiere es un replanteamiento en el que se impulse y reconozca que las personas con discapacidad tienen los mismos derechos y las mismas obligaciones que una persona que no tiene discapacidad, tal y como lo establece el Artículo 1 de la Constitución General de la Republica, por tanto deben ser tratados de la misma forma.

El reconocer la igualdad social de las personas con discapacidad no sólo es un precepto constitucional, sino es un ordenamiento internacional que el estado mexicano debe atender, garantizar y cumplir, ya no sólo en el marco de la promoción como en México se viene haciendo desde el 2008, sino en el de políticas públicas tal y como se dicta en la “Convención sobre los derechos de las personas con discapacidad”. Vale resaltar que un elemento a considerar y producto de la Convención es la consigna “Nada de nosotrxs sin nosotrxs”.

Precisamente y con el firme propósito de contribuir a ello, el Partido Revolucionario Institucional impulsa un DECÁLOGO POR LA INCLUSIÓN, que son un conjunto de preceptos que tienen como premisa generar conciencia en toda su militancia y en consecuencia incidir en la sociedad para:

1.- Prevenir y erradicar cualquier forma de discriminación por motivos de discapacidad, asegurando que este sector social se incluya sin restricciones a la vida partidaria, como militante, simpatizante o dirigente.

2.- Promover una cultura de inclusión de las personas con discapacidad de forma que sean incorporadas con equidad en todas las acciones que se realicen.

3.- Impulsar acciones de accesibilidad en la infraestructura para asegurar la movilidad, así como establecer estrategias que permitan el acceso a la información.

4.- Establecer una agenda vinculante con las organizaciones de la sociedad civil que representan a las personas con discapacidad.

5.- Apropiar al interior del Partido como una causa permanente la inclusión y el desarrollo de las personas con discapacidad.

6.- Promover transversalmente en las plataformas políticas, los derechos de las personas con discapacidad.

7.- Fomentar la formación de cuadros integrados por personas con discapacidad para dirigencias y candidaturas a puestos de elección popular.

8.- Promover la participación de personas con discapacidad en la vida pública, fomentando su aspiración para competir por candidaturas a puestos de elección popular y dirigencias en la vida partidaria.

9.- Difundir entre la sociedad las causas, inquietudes y propuestas para la inclusión de las personas con discapacidad.

10.- Promover en los gobiernos emanados del Partido, acciones transversales para la inclusión de las personas con discapacidad.

Como podemos ver, desde la sociedad civil, desde el sector gubernamental y desde las organizaciones partidistas, hoy se está tomando conciencia de ello.

En razón de lo anterior, la Secretaría de las personas con discapacidad del CDE en San Luis Potosí, viene realizando desde el 8 de diciembre del 2018 una serie de acciones para su difusión.

Nos dice Stella Young.- “Somos una sociedad que trata a las personas ‘con discapacidad’ con condescendencia y lástima, y no con dignidad y respecto”.-

“Te invitó a que sea cual sea tu espacio, sumémonos a la generación de conciencia y al impulso de las políticas y estrategias necesarias para que las personas con discapacidad puedan ejercer sus derechos plenamente”.

Qué ¿le entras?

Google News