A la violencia, se sumó en los últimos tres años la ineptitud y negligencia de la alcaldesa morenista, Abelina López
Ambos resultaron ser los peores dirigentes que le pudieron tocar al priismo y al panismo en los últimos seis años y quizás en su historia.
Empezó ya el reparto de culpas que, inevitablemente, apunta hacia el último dirigente nacional del perredismo, Jesús Zambrano, y hacia su corriente política denominada “Los Chuchos”.