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El regreso a clases siempre trae consigo un ajetreo en las tiendas de uniformes del centro histórico de San Luis Potosí, ya que con el fin de las vacaciones los padres de familia acuden a comprar el uniforme de las y los hijos para tener todo listo en la entrada a clases.
EL UNIVERSAL San Luis Potosí realizó un recorrido entre las y los comerciantes y clientes de uniformes escolares, revelando que en promedio se gasta entre mil 500 y 2 mil pesos por alumno en la compra de uniformes para el siguiente ciclo escolar.
Durante el recorrido, los propietarios y empleados de diversas tiendas coincidieron en que los artículos más vendidos fueron los uniformes completos, que incluyen camisas, pantalones o faldas y suéteres, así como chamarras, playeras y pants deportivos por todos los estudiantes que ingresan a una escuela nueva o que crecieron y ya nos les queda el uniforme anterior.
Sin embargo, muchas familias compran una o dos prendas únicamente, ya que son las que les hacen falta y hasta ya empezado el ciclo escolar van comprando conforme ocupen otra prenda.
“Las personas que sólo vienen por una o dos prendas lo que más compran son las playeras deportivas y pantalones, ya que se les rompe a los niños porque se arrastran mucho”, comentó Juan, un empleado de una tienda de uniformes en la calle de Escobedo.
El sondeo también reveló que, aunque el precio aproximado para los uniformes está entre mil 500 y 2 mil pesos por estudiante, el monto varía dependiendo de la escuela, la talla y la cantidad de piezas de uniforme que compren, por ejemplo, los padres que optaron por uniformes de tallas más grandes o con detalles personalizados, como el bordado del logotipo de la escuela o nombre del alumno reportaron un gasto mayor.
A pesar de los esfuerzos de algunos comerciantes por mantener precios accesibles, varios padres entrevistados mencionaron que el costo de los uniformes escolares representa un desafío financiero.
Ana una madre de familia que compraba en un local cercano a la calle de Reforma señaló que este año todo está más caro, pero no se puede escatimar en los uniformes. “Es una inversión necesaria para que nuestros hijos vayan bien presentados a la escuela".
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Otra madre de familia que se encontraba próxima a comprar uniformes expresó que los niños crecen tan rápido que a veces dejan el uniforme en buen estado, pero como ya nos les queda tienen que gastar en uno nuevo. “En el caso de mis hijos el uniforme está aún en buen estado, pero ya crecieron y no les queda y tengo que comprar todo nuevo”, puntualizó Margarita.
El regreso a clases es siempre un evento de gran relevancia para la economía local y el Centro Histórico de la capital potosina no es la excepción. Los comerciantes, aunque satisfechos con el volumen de ventas, esperan que los próximos días sigan siendo igual de productivos, ya que muchos padres suelen hacer compras de última hora.
