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A pesar de las complicaciones con las que arrancó el número de emergencia 911, mismas que han sido denunciadas por la ciudadanía, se registró una disminución en el número de llamadas de broma solicitando la atención de la Cruz Roja, aseguró el delegado de la dependencia, Óscar Segura Rodríguez, quien comentó que uno de los principales problemas que limita la atención de incidencias es precisamente las llamadas apócrifas, hecho que además implican un gasto inútil en la infraestructura, gasolina y del trabajo humano.
Antes de la implementación del número de emergencia 911 se atendían al día más de 120 llamadas falsas en los tres turnos, es decir del total de las solicitudes de emergencia, el 90 por ciento no eran reales. Actualmente, al día se canalizan a la Cruz Roja entre 80 y 90 llamadas falsas, en comparación con las 120 que se recibían cuando contaban con un número propio.
Explicó que el 911 cuenta con operadores telefónicos de la Cruz Roja, quienes tienen el deber de detectar las llamadas reales y canalizarlas a las instancias correspondientes, pues la atención oportuna puede significar la diferencia entre la vida y la muerte.
El delegado de la dependencia recordó que el 911 cuenta con un sistema de rastreo para determinar el teléfono fijo o celular desde el que se realizaron las llamadas falsas, lo que permitirá emitir apercibimientos a los bromistas, sin embargo reiteró que lo más importante es la cultura del respeto y crear una conciencia ciudadana que permitan abatir las cifras negativas que se presentan al respecto.
maria.hernandez@clabsa.com.mx
gpl
