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A 27 años de las explosiones que devastaron 8 kilómetros de calles en el Sector Reforma de Guadalajara, los sobrevivientes quieren que Pemex se declare responsable y que el gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro, pida al presidente Andrés Manuel López Obrador que la petrolera del Estado al menos se disculpe con los tapatíos.
Esta mañana como cada año, frente al monumento Estela contra el Olvido, erigido en el barrio de Analco, el más afectado por la tragedia del 22 de abril de 1992, los sobrevivientes, en voz de Lilia Ruiz, leyeron un pliego de demandas al gobierno, entre las que se encuentra que Pemex reconozca y asuma la responsabilidad de lo que ocurrió aquel día.
En palabras de Ignacio Morales Lechuga, quien como procurador de la República encabezó la investigación por estos hechos, “se trató de una desafortunadísima negligencia de los encargados de Pemex de no estar vigilantes de la protección catódica del ducto y de una desafortunadísima intervención de los responsables de Protección Civil, que llegaron y ordenaron a los bomberos que vaciaran agua y el agua, como nos enseñaron en la escuela, es H2O y lleva oxígeno y el oxígeno aumentó el peligro de explosividad en lugar de reducirlo”.
Oficialmente la explosión del drenaje causó la muerte de 212 personas, la desaparición de 69 y dejó mil 470 lesionados; las hipótesis de las autoridades eran que se trataba de una toma clandestina o un accidente.
Durante la investigación, en la Zona Industrial de Guadalajara, se descubrió una mancha grande de gasolina y al excavar se localizó un orificio de 12 milímetros en el poliducto que llega de Salamanca; la versión oficial señala que el combustible se filtró al subsuelo y de ahí al drenaje.
Según los datos de la investigación encabezada por Morales Lechuga, el daño en el poliducto se debió a la falta de protección catódica en éste.
Pese a lo anterior, la PGR determino que se trató de un accidente y no había conducta criminal que perseguir; Pemex y el Estado, por su parte, nunca asumieron la responsabilidad de reparar el daño a las víctimas, de ahí la exigencia de Ruiz y los demás sobrevivientes que conforman la Asociación Civil 22 de Abril en Guadalajara.
Ante la exigencia, el mandatario estatal propuso crear una mesa de trabajo para, antes de que termine abril, redactar una recapitulación histórica de lo ocurrido ese día y pedir al presidente Andrés Manuel López Obrador al menos una disculpa por parte de la petrolera.
“Creo en la idea del valor de llegar a una conclusión respecto a los responsables, no puede quedar esta historia en bajar los brazos y permitir que Petróleos Mexicanos simple y sencillamente siga sin decir nada al respecto; (…) creo que (Andrés Manuel López Obrador) ha dado muestras de que él también entiende el valor de un perdón aunque sea a destiempo, vamos a hacer un último esfuerzo, porque Pemex le debe a nuestro estado una disculpa y asumir su responsabilidad”, señaló.
Alfaro se comprometió a entregar personalmente esta petición al Presidente y a hablar con él del tema.
Además, señaló que este será el último año en que los sobrevivientes luchan por que el gobierno del estado cumpla sus demandas, pues aseguró que la atención médica será digna y no dependerá de la voluntad del gobierno en turno.
Dijo que el fideicomiso para atender a los sobrevivientes se recapitalizará con la entrega de un millón de pesos y se integrarán a éste nueve víctimas que no habían sido tomadas en cuenta.
